lunes, 9 de septiembre de 2024

EL CABO CARICATURAS. José María Pérez, Peridis, “sembrador de utopías”


Dedica el libro a su hija Marta (1973-2007¿), in memoriam: “un cáncer inesperado e inmisericorde interrumpió su vida en lo mejor del camino”. 

“Jamás se me había pasado por la cabeza escribir mis memorias…” -cuenta en el Preludio. “…me he puesto a contar a la pata la llana aquellos acontecimientos, anécdotas, sucesos y casualidades que fueron marcando mis vocaciones… He querido traer a la memoria las personas y los hechos…”.

Liébana, el paraíso perdido

“La primera Liébana… se corresponde con mi paraíso perdido”. Peridis nace en Cabezón de Liébana el 28 de septiembre de 1941.

Aguilar de Campoo. La casa del calero

“En Aguilar de Campoo…, nuestro domicilio, en la calle del Puente, justo encima de lo que es ahora el restaurante Cortés…”. Al inicio de la calle hay un molino, y enfrente…, está la ermita de San Roque.

“La vida en Aguilar no se desarrollaba detrás de las tapias, sino al cobijo de los soportales. Había calles con soportales, callejas con soportales y plazas con soportales”.

“Corría el año 1947, y mi padre… se había lanzado a la aventura de levantar un horno de cal en las afueras…, en la falda del risco de piedra caliza, llamado Peñalonga”. …”éramos los Caleros”.

Sobre él mismo

“Siempre he querido ser actor y observador al mismo tiempo”, siempre ando repicando y en la procesión

“Empecé a ejercitar la ironía y el sarcasmo, las armas más inteligentes y eficaces para la defensa y el ataque”.

EN BREVE

La primera novela que leí se titulaba La caravana de esclavos de Karl May”.

La primera película que presencié fue Flecha rota [en el cine Amor o Campoo, de Aguilar de Campoo].

La primera tira que publiqué

“Trataba sobre la inflación en Francia, y versaba sobre Pompidou”.

Lugares

Santa María de Redondo, primera localidad por donde pasa el Pisuerga. “En verano, coincidiendo con la trilla y la recogida de la hierba, nos mandaban quince días o un mes a Santa María de Redondo…  [Ahí] habían nacido mis padres… Allí vivían por aquel entonces la mayor parte de nuestros tíos y primos”.

Lomilla, Pomar de Valdivia, Corvio… “Mi padre… nos mandaba a cobrar facturas con la bicicleta… a nuestros deudores [por la cal]… Tendríamos alrededor de doce o trece años”.

Sus maestros en la caricatura

Cronos [Carlos Méndez López, caricaturista deportivo], “mi maestro en la distancia”. “Realizaba en el diario Marca elegantes dibujos de deportistas… Sencillez, humor, elegancia y finura eran las señas de identidad”.

José Ramón Sánchez, “mi mentor y mi maestro de la caricatura”.

Primeras caricaturas publicadas en el periódico escolar, en Palencia

Se llama El berrido del aula, El “berri” (“título que escogimos por votación”). “Era un periódico mural encuadernable”, en quinto de bachillerato en el colegio marista Castilla de Palencia. “Hicimos pinitos periodísticos, literarios y gráficos la mayor parte de los alumnos”. Entre las caricaturas de entonces conservo dos apuntes….: un dibujo de frente del hermano Francisco y la caricatura de medio perfil del hermano Jorge… Me di cuenta de que con un solo trazo de la boca se podía conseguir expresar la bondad de una persona y al tiempo convertirla en personaje para una historieta”.