lunes, 28 de enero de 2019

UN INVIERNO A SOLAS EN LA NATURALEZA SALVAJE



Este es el postítulo  de Indian Creek (literalmente, el arroyo Indian), el lugar donde el autor, Pete Fromm, pasa 7 meses (desde mediados de octubre a mediados de marzo) a sus veinte años (cuidando huevos de salmón), que no podrá relatar hasta 15 años después, en 1993 (su segunda obra tras los relatos de The tall uncut). “Aunque había llegado allí simplemente para tener una historia que contar, pasaría algún tiempo antes de que encontrara algo que decir”…

“La natación era lo que me había arrastrado a aquella tienda oscura…”- comienza la historia.

“Un día una hoja de papel se deslizó de una pila de catálogos de universidades que había traído un amigo. En primer plano aparecía un muflón, símbolo de la vida salvaje y la libertad. Por encima del animal se leían las oscuras palabras “Ecobiología” y “Universidad de Montana…”. A él le encantaba deambular por los bosques y la ecobiología “se parecía bastante a un deambular de carácter profesional”…

En mitad de la carrera surge la oportunidad y, para conservar la beca, se matricula en un seminario sobre escritura de diarios de 9 meses de duración.

Su alojamiento

Es una tienda de lona de 20 metros cuadrados con suelo de contrachapado en un valle entre montañas. “En el lado derecho de la tienda coloqué los viejos armarios de madera…Mi cama (un pequeño somier de muelles) y la pila de leña ocuparían la parte izquierda, y la mesa (de madera contrachapada) quedaría al fondo frente a la puerta. La estufa de leña en el rincón, la mesa a un lado y la cama al otro”.

“Llené un armario con ropa y el otro con comida…”.

Su equipo

“…compré suficiente arroz para varios años y suficientes alubias para más de una década…, cuarenta y cinco kilos de patatas…, velas, hachas y cuñas…, dos pares de raquetas…, tres pantalones de lana…, trampas…, un rifle de cerrojo de calibre 22… y el Hawken de calibre 54…, cerillas Ohio Blue Tips grandes, las que de siempre me había gustado utilizar cuando de niño iba de acampada…y… unos cuantos libros”. Añade 6 sacos de 25 kilos de comida para perros cuando le regalan un cachorro de husky.

Su biblioteca (6 libros)

Bajo cielos inmensos, de A.B. Guthrie (“mi biblia”), varios manuales Foxfire (cómo escaldar cerdos para quitarles el pelo, técnicas de curtido…), los libros de Bradford Angier sobre la supervivencia a la intemperie y un viejo catálogo Herter´s de recetas para preparar en la naturaleza. En el primer envío de casa, su padre le hace llegar “todas las historias de Sherlock Holmes y El libro de la selva”. Más tarde, el viaje de Scott al Polo Sur.


 Su trabajo

“Consistía en ir todas las mañanas al canal…y, si se había formado hielo, romperlo…me llevaría quince minutos al día, caminata incluida. Tenía el resto del tiempo a mi disposición”. También se encarga de la estación meteorológica.

El día a día

“Trabajaba todos los días hasta la extenuación (había aprendido que no había que dejar ni un momento al ocio, sobre todo en horas bajas) y me acostaba en cuanto terminaba la cena, que por lo general consistía en una mezcla de patatas y jamón enlatado”. El maíz enlatado es otro de sus alimentos básicos. “Mi dieta a base de arroz o patatas que a veces acompañaba con ardillas o urogallos…”. “Gachas de avena para desayunar, pan para almorzar (hacerlo le lleva un día entero) y arroz para cenar”.

Tras partir leña (más de once cuerdas), se dedica a la caza, a poner trampas y a almacenar comida. También realiza largas caminatas.

Por las noches, se pone a leer. Y empieza a hacer listas…”Escribía las listas en los cuadernos que había comprado para mi clase de escritura de diarios y, cada noche antes de acostarme, describía lo que había hecho durante el día”. “Mis actividades nocturnas habituales:…beber  té y releer un manual Foxfire”. También escribe largas cartas a amigos y familiares. Y escucha la radio, cuando consigue sintonizarla.

En los momentos más crudos del invierno, inventa proyectos, hace mocasines, remienda sus camisetas de lana, engrasa los rifles, lee y cocina.

Momentos bajos

No todo es alegría y aprecio de esta vida en soledad. En distintas ocasiones, se pregunta:
“¿Qué más estaría pasando allí fuera? ¿Qué más me estaba perdiendo…?". 

“Yo me lo había perdido todo allí sentado, jugando a ser un hombre de las montañas [a mountain man]”.

“Me pegunté si alguna vez saldría de allí…”.

“Temí caer en una depresión tras el fracaso de la visita de mi padre y mi hermano [en navidades]”.

Su aprendizaje

“Nunca había manejado una motosierra”. No sabía que era “una cuerda de leña” (una pila de un metro de fondo, un metro de alto y dos metros y medio de largo. Necesitaba al menos 7 para pasar el invierno).

Se corta un dedo con la navaja suiza de bolsillo. Casi se congela por dejar su abrigo de plumas en un momento de euforia en un invierno que no subía de los 10 grados bajo cero. Descubre que las patatas congeladas, al descongelarse, “rezuman el caldillo más hediondo que había olido jamás”. Caza y sala su propia comida...

Algunos datos sobre el autor

Nacido en Wisconsin (Milwaukee) en 1978, va a estudiar a la universidad de Montana, en Missoula. En la actualidad, vive en Montana con su mujer y dos hijos.

Escribe el guión del cortometraje Dry rain (Lluvia seca), en 2007, basado en uno de sus relatos. En 2013, se estrena una película As cool as I am (Tan genial como yo), basado en su novela del mismo nombre.

SABER MÁS


The Tall Uncut (1992).Vidas y paisajes del oeste Americano. Su primera publicación (relatos).


https://www.youtube.com/watch?v=IaabrmYJWxc. La importancia de la experiencia de vida. Entrevista.


https://www.youtube.com/watch?v=GN6Cy5dWX4M .    Dry Rain. Tráiler.







No hay comentarios:

Publicar un comentario